Durante cada una de nuestras consultas, tras un intercambio de información y haberte observado el cuerpo, la lengua y haberte tomado los diferentes pulsos chinos, valoramos tu equilibrio energético. Te proponemos una armonización personalizada, utilizando diferentes técnicas en función de tus necesidades y exigencias.
A medida que se van colocando las agujas, y a veces, de forma simultánea, gracias al uso de ventosas o a la moxibustión, el equilibrio energético se va restaurando. Tu cuerpo interactúa durante la consulta haciendo que esta se convierta en un momento de relajación y liberación emocional.