Pediatra Homeopata

Muchas madres ya utilizan la homeopatía con sus hijos, especialmente para aliviar el dolor de la dentición, aliviar un resfriado o combatir una enfermedad similar a la gripe. Estos son tratamientos sintomáticos. Consultando a una pediatra homeópata es posible llegar mucho más lejos gracias a tratamientos básicos, personalizados y sin efectos secundarios ni interacciones.

Si tu peque sufre, por ejemplo, infecciones de oído repetidas o sinusitis, eccemas, alergias, trastornos de la digestión o del sueño, o si se siente ansioso, no dudes en consultar a nuestra pediatra homeópata.

La consulta se desarrolla en dos etapas: la entrevista y luego el examen clínico. La primera parte consiste en comprender la historia familiar y de l@ niñ@, el embarazo de la madre, el carácter, la personalidad y posiblemente los síntomas. Como un bebé tendrá dificultades para expresar sus emociones y sentimientos, la pediatra homeópata realiza entonces un examen clínico: “Cuando la boca no habla, el cuerpo se expresa”. La piel, las uñas o la lengua pueden revelar ciertas disfunciones. Además, la homeópata observa a tu niñ@, su actitud, sus reacciones, etc., durante toda la consulta.

Puedes obtener los tratamientos homeopáticos en farmacias y seguir la prescripción médica para tratar lo mejor posible a tu hij@, gracias a la medicina natural de la homeopatía.